Según un informe divulgado por la organización Hum Venezuela, el 80% de los venezolanos enfrenta dificultades para acceder a los servicios básicos (agua, electricidad, educación, salud y gas).
En este sentido, el trabajo señaló que el promedio de grupos familiares afectados por las interrupciones en el servicio de agua se ubicó en 43% entre junio de 2021 y marzo de 2022.
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Además, se conoció que Nueva Esparta, Distrito Capital y Amazonas fueron las entidades más afectadas por las restricciones al suministro del vital líquido.
Con respecto a este mismo tema, el informe precisó que ante la falta de agua, el 40% de los grupos familiares participantes se ve obligado a comprar botellones de agua y que el 74% de ellos denunció contaminación en el líquido.
Monitor Ciudad
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Por otra parte, la organización determinó que de 20 mil 186 personas entrevistadas, el 63% no cuenta con servicios de telefonía fija, mientras que el 52,2% no cuenta con internet. No obstante, el 89,3% dispone de telefonía celular.
En cuanto a las fallas eléctricas, Mérida (75,2%), Táchira (69,5%), Nueva Esparta (46%) y Aragua (29%) fueron los estados más afectados.
El estudio también detalló que el 99% de los grupos familiares reportan problemas de subsistencia económica, lo que se traduce en dificultades para cubrir los gastos referentes a la comida.
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De hecho, el 55% de los encuestados utilizaban casi todo su presupuesto en la compra de alimentos, mientras que 14 gastaban más de la mitad.
Canasta básica
Entre las regiones más afectadas figuran Monagas (74,5%), Anzoátegui (46%) y Bolívar (37%), puesto que son las entidades que presentan mayores restricciones para la compra de alimentos por no contar con presupuesto.
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Asimismo, el 50% de los grupos familiares entrevistados no consumen «nunca o casi nunca» alimentos como frutas, pescado, carne, pollo, leche, plátanos, vegetales, tubérculos y pan. Los alimentos más consumidos son granos, arroz, pasta, harina de maíz, huevos y queso.
En el área de la Salud, el 89,4% de la población depende de centros de salud públicos para atender sus necesidades de salud. Con respecto a ello, en marzo de 2022 se registró un aumento en la dependencia de hospitales o ambulatorios públicos (76,7%), mientras que el acudir a clínicas a través de consultas con seguro se redujo a 1,4%.
Entre junio de 2021 y marzo de 2022, el porcentaje de individuos que perdió el acceso a los servicios, bien sea por inoperatividad o cierre de instituciones sanitarias, aumentó de 65,5% a 67%.
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Hospitales
También se reveló que el 91,5% de los grupos familiares encuestados no cuenta con protección financiera en salud y el 58% tampoco cuenta con medios económicos para enfrentar gastos en esta área.
Adicionalmente, en el segmento de la educación, los encuestados indicaron que el 74,7% de las escuelas básicas presenta deterioro en su infraestructura.
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Los aspectos con mayor deterioro son las deficiencias en el acceso a computadoras (92,5%), servicios de Internet (93,3%), la falta de transporte (93,3%), las fallas de agua (78,5%) y de electricidad (67,6%).
El déficit de docentes se ubicó en 75%, siendo los estados más afectados Amazonas (94,8%), Aragua (88,2%), Monagas (91,8%) y Trujillo (91,6%).
Por último, en cuanto a las fallas severas por varios días, semanas o meses en servicios básicos, el 59% de los grupos familiares se vieron afectados en el acceso a gas por bombonas, el 69% en el acceso a la electricidad y el 45% en acceso al aseo urbano.