Incendios forestales azotan Turquía en temperaturas récord
Las autoridades de protección civil en Turquía combaten múltiples incendios forestales en diversas regiones del país, mientras las temperaturas alcanzan niveles históricamente altos para esta temporada.
"Bomberos combaten incendios forestales en la provincia de Usak, Turquía, en medio de temperaturas récord."
Este jueves, las temperaturas más elevadas se registraron en la provincia suroccidental de Denizli con 41 grados Celsius y en las provincias de Diyarbakir y Sanliurfa con hasta 44 grados. En Anatolia central, incluida Ankara, el calor alcanzó los 35 grados.
Desde el inicio de la semana, incendios forestales se han declarado en varias provincias occidentales, incluyendo Usak, Manisa, Esmirna, Balikesir, Bursa y Çanakkale. El incendio en Usak, que duró más de 40 horas, fue controlado finalmente por los equipos de emergencia.
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Las altas temperaturas, superiores en 10 grados a lo habitual para la época, complican las labores de extinción y aumentan el riesgo de nuevos incendios. Según el Departamento de Meteorología de Turquía, la primavera de 2024 fue la segunda más calurosa de los últimos 53 años, solo superada por la primavera de 2018.
Para los próximos días, se esperan fuertes lluvias en el este del Mar Negro y el norte de Anatolia oriental. Además, se ha emitido un aviso de fuertes vientos para las partes suroccidentales y la costa septentrional del mar Egeo. Estas condiciones climáticas podrían ayudar a mitigar los incendios actuales, pero también presentan nuevos desafíos para las autoridades.
La situación ha generado preocupación entre los ciudadanos y los expertos. El profesor Mehmet Kaya, especialista en climatología de la Universidad de Ankara, comentó: «El cambio climático está exacerbando estos eventos extremos. Las altas temperaturas y los incendios forestales son solo una manifestación de un problema más amplio.»
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Las autoridades instan a la población a mantenerse informada y seguir las recomendaciones de seguridad. Los equipos de emergencia continúan trabajando sin descanso para controlar los incendios y minimizar los daños.
La lucha contra los incendios forestales en Turquía es una tarea titánica, agravada por el cambio climático. La cooperación entre las autoridades locales y la comunidad internacional será crucial para enfrentar estos desafíos en el futuro.