La Unión Europea adopta el 14º paquete de sanciones
El Consejo de la Unión Europea anunció nuevas sanciones económicas e individuales contra Rusia, afectando sectores clave como energía, finanzas y comercio.
El Consejo de la Unión Europea adopta nuevas sanciones contra Rusia para debilitar sectores clave de su economía.
El Consejo de la Unión Europea (UE) anunció este lunes la adopción del 14º paquete de sanciones económicas e individuales contra Rusia. Estas medidas afectan sectores vitales para la economía rusa como energía, finanzas y comercio, dificultando la elusión de sanciones de la UE, según un comunicado oficial.
Las nuevas sanciones incluyen medidas restrictivas sobre 116 individuos y entidades adicionales. En el sector de la energía, la UE prohibirá servicios de recarga del gas natural licuado ruso en territorio comunitario para operaciones transnacionales de envío a terceros países. Además, se prohibirán nuevas inversiones y el suministro de bienes, tecnología y servicios para la finalización de proyectos en construcción relacionados con esta materia prima.
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Sobre las finanzas, el Consejo decidió ilegalizar el uso del Sistema para la Transferencia de Mensajes Financieros (SPFS), un servicio especializado de mensajería financiera desarrollado por el Banco Central de Rusia para contrarrestar el efecto de las sanciones. Las entidades de la UE que operen fuera de Rusia tendrán prohibido conectarse al SPFS o cualquier servicio especializado equivalente. Los operadores de la UE no podrán hacer transacciones con entidades listadas que usen el SPFS fuera de Rusia, añadió el comunicado.
La UE ha ampliado la prohibición de vuelos, extendiéndola al transporte de bienes por carretera dentro de su territorio. También se imponen restricciones a la exportación de productos químicos como mineral de manganeso, compuestos de tierras raras, plásticos, maquinaria excavadora, monitores y equipamiento eléctrico. Además, se han impuesto más restricciones a la importación de helio desde Rusia.
Las nuevas sanciones refuerzan la postura de la UE contra Rusia y buscan debilitar sectores clave de su economía. La medida responde a las continuas acciones de Rusia que la comunidad internacional considera contrarias al derecho internacional.