El Micelio: La red oculta que sostiene la vida en la Tierra
El micelio, una red subterránea esencial para la vida, desempeña un papel fundamental en la descomposición y fertilización de los suelos. Esta estructura, vital para los hongos, conecta organismos y mejora la calidad del suelo en vastas áreas
Por: Jaime Largo. – Hoy exploraremos un tema que es desconocido para millones de personas en nuestro planeta, pero que resulta básico y esencial para nuestra supervivencia y la del resto de los seres vivos, incluyendo al ser humano, la fauna y la flora del mundo: el micelio.
Sin más preámbulos, hablemos de esa maravillosa red viviente que conecta a toda la naturaleza: el micelio.
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¿Sabes qué es el micelio? ¿O alguna vez has escuchado sobre su significado y la importancia que tiene para toda la vida? Posiblemente no, y aquí te lo vamos a explicar.
El micelio es una estructura de los hongos, similar a una raíz, compuesta por una masa de hifas ramificadas o filamentos de textura filamentosa, que forman la parte vegetativa de los hongos pluricelulares como las setas y los mohos. Es, en esencia, una gran red de vida que permite la comunicación entre esos organismos y todo el ambiente que los rodea, el cual puede extenderse por muchos kilómetros a la redonda.
¿Dónde se encuentra?
El micelio es la parte de los hongos que no observamos, una red que suministra nutrientes a lo largo del cuerpo del hongo, similar a las raíces de las plantas. Estos filamentos, conocidos como hifas, constituyen una red literalmente extensa, de cientos de kilómetros. Toda esta inmensa e increíble red se propaga como una infinita telaraña subterránea que recuerda a las gráficas neuronales, con sus millones de conexiones, o a una infraestructura diseñada para el internet.
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Ahora que conocemos un poco más sobre el tema, surgen ciertas dudas. Por ejemplo, ¿cómo se alimenta el micelio? El micelio se caracteriza por alimentarse de materia en descomposición, lo que simultáneamente sirve para depurar y enriquecer los suelos, volviéndolos más fértiles y productivos.
¿Para qué sirve el micelio?
El micelio, aunque es casi imperceptible a simple vista en muchos casos, es fundamental y vital en nuestros ecosistemas terrestres y acuáticos. Juega un papel crucial en la descomposición del material vegetal y contribuye a la formación orgánica del suelo. A través de su crecimiento, libera dióxido de carbono a la atmósfera, el cual atrapa el calor o los gases que producen el efecto invernadero, lo que es perjudicial para la vida en nuestro planeta.
Además de los beneficios que conocemos, de este elemento natural, en términos de oxigenación y transporte de nutrientes entre los hongos y el medio ambiente, podríamos preguntarnos si tiene otra finalidad o uso. La respuesta es sí. El micelio ha sido consumido ancestralmente como alimento, atribuyéndosele propiedades que aumentan la vitalidad y mejoran la salud. Algunos, como el micelio del hongo Chaga, parecen tener componentes que fortalecen el sistema inmunológico y ofrecen una respuesta positiva al estrés. El micelio posee proteínas en su base seca, y el contenido de proteínas del hongo, como el micelio, oscila entre el 20% y el 30%.
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¿Qué prácticas pueden dañar el micelio?
Las alteraciones en el micelio pueden ocurrir como consecuencia de cambios en el suelo, como el arado, compactaciones, excavaciones o intervenciones en el sustrato, así como por el uso indiscriminado de fertilizantes y fungicidas empleados en la agricultura.
En definitiva, los seres humanos debemos tomar conciencia de nuestro papel en la vida, la naturaleza y el futuro de nuestro planeta. Podemos comenzar respetando y protegiendo incluso a estos seres vivos, muchas veces imperceptibles a la vista.
*Jaime Largo. Animalista, amante de la naturaleza, senderista, vicepresidente Fundación Colinas de Carrizal. Correo: jaimel2010@gmail.com @caminandoconjaime2 @jaimelargo2021