Tragedia en Makala: 129 muertos durante intento de fuga
Un fallido intento de fuga en la prisión central de Makala, Kinsasa, dejó al menos 129 muertos, 59 heridos y múltiples daños materiales. El Gobierno congoleño ha iniciado una investigación.
Intento de fuga en prisión de Makala deja 129 muertos
Kinsasa, 3 de septiembre (EFE).- Un intento de fuga en la madrugada del lunes en la prisión central de Makala, la más grande de la República Democrática del Congo (RDC), resultó en la muerte de al menos 129 personas. El incidente, que involucró a un número indeterminado de reclusos, ocurrió en Kinsasa, la capital del país, según informó el Gobierno congoleño.
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El ministro del Interior, Jacquemain Shabani Lukoo, detalló que 24 de las víctimas fallecieron por disparos efectuados por las fuerzas de seguridad, mientras que las demás murieron por asfixia o en medio de los empujones durante el caos. Además, 59 personas resultaron heridas, y se reportaron varios casos de mujeres violadas en medio del disturbio.
Impacto y respuesta del gobierno
Los disturbios también causaron importantes daños materiales, incluyendo la destrucción de los edificios administrativos de la prisión, la enfermería y los depósitos de alimentos. «El Gobierno deplora estos trágicos hechos y extiende sus condolencias a las familias de las víctimas», declaró Lukoo a través de la red social X. El ministro subrayó que se ha iniciado una investigación para esclarecer los hechos y que se ha convocado una reunión de crisis con los jefes de los servicios de defensa y seguridad.
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El viceministro de Justicia, Mbemba Kabuya, también confirmó que el incidente fue un acto de rebelión interna que se originó en el pabellón 4 de la prisión, desmintiendo que la cárcel haya sido atacada desde el exterior. Kabuya, en declaraciones recogidas por medios locales, había informado inicialmente sobre dos muertes.
Antecedentes de la prisión de Makala
La prisión de Makala ha sido escenario de violencia en el pasado. En 2017, unos 4.500 presos lograron escapar tras un asalto perpetrado por seguidores de la secta Bundu Dia Kongo, quienes buscaban liberar a su líder, Mwana Nsemi. Actualmente, Makala está superpoblada, albergando a más de 15.000 reclusos en instalaciones diseñadas para apenas 1.500 personas.
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El Gobierno congoleño expresó satisfacción por el regreso a la calma, pero la situación subraya la crónica sobrepoblación y las condiciones deplorables que enfrentan las cárceles en la RDC. La seguridad y el orden en estas instalaciones siguen siendo una preocupación urgente para las autoridades.