Evo Morales lidera marcha hacia La Paz en exigencia de su candidatura
Evo Morales continúa una marcha hacia La Paz, exigiendo su habilitación como candidato para las elecciones de 2025, pese a la invitación al diálogo del Gobierno.
Evo Morales encabeza la marcha hacia La Paz exigiendo su candidatura para las elecciones de 2025.
El expresidente boliviano Evo Morales encabezó este viernes el cuarto día de una marcha hacia La Paz, con el objetivo de exigir su habilitación como candidato para las elecciones de 2025. A pesar de la invitación al diálogo extendida por la ministra de la Presidencia, María Nela Prada, Morales rechazó cualquier acercamiento, afirmando que no ha recibido una invitación oficial.
La movilización, que comenzó el martes en Caracollo, región de Oruro, ha avanzado varios kilómetros en su ruta hacia la capital. El jueves, los manifestantes pernoctaron en Patacamaya, a 97 kilómetros de La Paz, desde donde reanudaron su marcha este viernes.
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En declaraciones a la prensa, Morales rechazó la invitación al diálogo realizada por el Gobierno de Luis Arce. «Es parte de lo que siempre hablan, no tengo nada que comentar porque no es nada oficial», señaló el exmandatario. La ministra Prada había llamado a Morales a detener la movilización, argumentando que podría provocar enfrentamientos entre bolivianos.
Prada reiteró su invitación al diálogo para este viernes en La Paz, con la esperanza de evitar una escalada de tensiones. «Hoy una vez más invitamos a Evo Morales a entablar un diálogo para que deje de seguir llevándonos a una situación de conflictividad que puede terminar con las vidas de bolivianas y bolivianos», afirmó la ministra.
La marcha, apoyada por sectores sociales afines a Morales, busca garantizar su participación en las elecciones de 2025, a pesar de la controversia generada dentro del oficialismo. Morales ha mantenido que la movilización «no es de Evo, es del pueblo», y ha dejado en manos de los sectores sociales la decisión de continuar al frente de la marcha.
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Los seguidores de Morales, muchos de ellos miembros del Movimiento al Socialismo (MAS), consideran que su liderazgo es esencial para las próximas elecciones. A medida que la caminata avanza hacia La Paz, las tensiones políticas en Bolivia aumentan, generando preocupación por posibles enfrentamientos.
Morales ha indicado que continuará liderando la marcha «hasta el final», lo que sugiere que no cederá ante las propuestas del Gobierno. La confrontación entre el expresidente y el actual mandatario, Luis Arce, continúa dividiendo al MAS y creando incertidumbre sobre el futuro político del país.