Opinión
CURUCUTEANDO / Viva con su mente tranquila, manténgase ocupado
En un mundo lleno de desafíos, aprender a controlar la mente y mantener la paz interior es clave para una vida equilibrada. Descubre cómo lograrlo a través de técnicas sencillas de autocontrol, relajación y meditación.
Por: Edicta Gómez Merchán.- Para lograr la tranquilidad mental, la serenidad de los nervios y la paz del alma, es necesario un esfuerzo constante, orden y dedicación en la práctica de ejercicios de autocontrol, relajación y meditación. Reflexione sobre el hecho de que, aunque pueda tener siete defectos, también posee sesenta cualidades. Los deseos deben transformarse en convicciones, y las convicciones en decisiones. La personalidad está influenciada por los códigos genéticos, como las inclinaciones hacia la sensibilidad, sensualidad, mezquindad, timidez, generosidad, impaciencia, nobleza, entre otros.
Lo importante es tener paciencia ante las dificultades, las cuestas empinadas, los retrocesos, las curvas pronunciadas, las caídas y las recaídas abruptas. Así como hay momentos de mejoría, también los hay de empeoramiento. En la medida de lo posible, es crucial mantener el esfuerzo y la lucha, con el objetivo de alejar el sufrimiento y la tristeza. La mente debe estar ocupada únicamente con recuerdos estimulantes e ideas positivas, evitando pensamientos tortuosos y complejos que la atormenten.
La mente es un motor que debe desconectarse cuando sea necesario apagar los fuegos internos, el infierno que ahoga y asfixia, evitando perturbaciones en la personalidad. Es importante liberarse de manías de grandeza y obsesiones que esclavizan, neutralizando, atenuando o transformando aquello que genera temor u opresión. Debe enfrentarse a la vida con todas las armas y medios a su alcance, aprovechando la experiencia adquirida, los consejos de los amigos, el sentido común, el entusiasmo, la discreción, los ideales, la pasión, y, sobre todo, con mucha paz interior.
Manténgase ocupado, pero nunca preocupado. Un temperamento irascible puede fácilmente llevarlo al borde de la locura cuando enfrenta una crisis nerviosa. En momentos de gran nerviosismo, si posee una personalidad hipersensible, puede llegar a convertir una aguja en una espada. El estado de ánimo influye directamente en la personalidad. Del infortunio o los contratiempos, se pueden extraer aspectos positivos y aprender valiosas lecciones de vida. Tenemos en nuestras manos las llaves de oro, que nos permiten transformar los males en bienes y los enemigos en amigos, viéndonos más como joyas y tesoros que como ruinas. Es fundamental recuperar la serenidad del espíritu. Aquella persona que se hace enemigo de todo lo que rechaza es un ser sombrío, suspicaz, temeroso y temible al mismo tiempo.