Este año estará marcado por cuatro eclipses que simbolizan cierres de ciclos y nuevas oportunidades, impactando en áreas clave de la vida personal y colectiva.
Física cuántica y pensamiento humano se entrelazan, revelando que la observación y la energía mental pueden afectar la realidad física y la vida personal.
La creencia en la capacidad de adivinar el futuro, arraigada desde tiempos inmemoriales, se distancia de la astrología, que busca promover el autoconocimiento.